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viernes, 6 de abril de 2012

La tormenta.

Juan salió a la calle a pesar de la tormenta. Yo le dije ; no , le rogué :" esperá , no salgas ahora..."
Al instante nos quedamos a oscuras sin electricidad  y escucho el portazo.

Busqué por todas partes y a tientas un paquete de velas , a mi edad tampoco podía joder mucho por miedo a caerme y quebrarme algún otro hueso.

Pensando en Juan y en la viuda con la que se estaba viendo , rompí dos vasos , hermosos, biselados  de esos que sólo usaba para las visitas... y me dije: "¿ ésto es lo único que puedo hacer? ¿ Es lo único de lo que soy capáz?

Cuando volvió la luz fuí a buscar los álbumes familiares , me tranquilizaba que al menos quedara un registro de algo parecido a la felicidad , ahí estaban congelados mis chicos sonriendo en los cumpleaños ,en placitas en brazos de Juan y en los míos .

Apagué la tele , era hora de hacer algo más ... El relój se apuraba en señalarme que no hiciera nada raro porque ... bueno él ya no tardaba en llegar , en un ratito entraría por la puerta trayendo un kilo de helado y aquella sonrisa que lo hacía inmune a cualquier reproche gastado que pudiera hacerle.

Pero ésta vez mi rebeldía  y todo aquello que fuí guardando y acomodando en las alacenas, junto a la yerba el azúcar y los fideos ahora cobraban un protagonismo que yo no hubiera querido.

Fué así como me decidí por tirarle su costosa dentadura nueva por el balcón para que los coches se la hagan pedacitos ...
Juan  , nunca se atrevió a  preguntarme donde estaban  y yo nunca me atreví a preguntarle a donde iba cada noche ,con quien estaba   cada noche que no estaba conmigo.

viernes, 30 de marzo de 2012

Procesión


De la enorme masa que avanzaba lentamente se escuchaba un solo grito , como de rabia guardada durante mucho tiempo,como con genuino rencor…” viva la virgen ,carajo”

Unos brazos enfundados en relojes dorados ,unos puños que hacían saltar las venas y el aliento a vino y a dentífrico .

Caía el sol y les dibujaba la silueta envolviéndolos en un aura rara ; luminosa y oscura.

El odio ahora se dirigía a la capillita . Ya no eran los que eran  ;  eran el odio llevando a una virgen en andas...

Si uno elegía pararse a cierta distancia frente a ellos y contemplar la escena, podía observar la urgencia de esa virgen por llegar a su capilla, por librarse de ellos ,por el perfume de sus flores en el jarrón…


Cada año, el trámite se hacía más complicado ,la gente salía a exorcizar sus odios paseándola cual trofeo de caza  y su mirada suplicaba que la dejen descansar ,que estaban  San Miguel   y San Pantaleón  al lado suyo en el altar…
Que ya no quería ser parte en ese ritual de odio e impotencia.


Texto: K .Olivera
Foto: J . Koudelka

sábado, 10 de marzo de 2012

La chica que sólo sabía gritar.



    La chica de al lado sale cada día a la calle con un perfume de rosas.

Yo , que puedo verla desde la terraza que dá a su patio, suelo  verla discutir a los gritos con el novio.

Entonces el aire se carga de restos de combustión como cuando se quema plástico.

Ella tiene los ojos buenos bajo la cortina de rimmel, menos , cuando me descubre parado en la terraza mirándola porque si...

Y no es que me parezca bonita , ni siquiera me la imagino en una cama.

Una tarde,manejando por la avenida durante una tormenta , pude verla esperando a que pare de llover bajo el toldo de una pizzería .

Como ella también ; una vez más encontró mi mirada , me sentí en la obligación de acercarla hasta su casa.

No me habló durante el viaje, mi culpa por espiarla me hizo aceptar su actitud sin más.
Tenía el rimmel corrido por el agua y su olor a rosas ahora era pesado.


Me dió las gracias con su dignidad de monja cuando llegamos.
Yo volví a la terraza varios días después y mientras pasaba la escoba por el zócalo ,ella volvío a aparecer en su escenario compuesto de macetas un quincho y un cuartito ;  sangraba .

Mansamente se dejó caer al lado de un piletón de hormigón , estaba más linda que todas esas veces en que no me había  parecido  linda...

Llevaba un delantal de cocina ,unas ojotas blancas y el pelo recogido.
Cayó ensangrentada. Dentro de la casa se oía el televisor rugiendo a todo volúmen y los timbrazos sordos del delivery que había pedido a gritos minutos antes...

Fué su novio quién llamó a la ambulancia y fuí yo ,por última vez testigo de su incapacidad para expresarse...
de su silencio.

sábado, 3 de marzo de 2012

16.


Cuantos años tenés?
-16 , le contesté. – Cuando cumplas 18, nos casamos…
Y me fui,atravesé el camino hecho de alambre y piedras desparejas ,rodeado de barro y basura .

Me salieron al paso varios perros flacos y chiquitos que jugaban y se reían mucho.

Estrenaba una camisa. Era verde militar ,ajustada usaba trenzas.

Todo iba poniéndose rojizo a mi paso ,la cara de Jacinta que había llorado todo el día ,colgando la ropa, Las parecitas de madera de las casas hundidas en la tierra , las pantallas de los televisores ,azules que se reflejaban desde afuera…

Su casa.
Quería que me viera pasar y justo hoy no estaba.
Quería sus ojos mientras corría para casa llena de bolsas de plástico y roja tambien , porque caía el sol y por la vergüenza …de que se diera cuenta ,que él me gustaba…

miércoles, 29 de febrero de 2012


La he soñado con los ojos llenos de clavos.
Herida.
En el sueño , le arrancaba uno a uno aquellos clavos .

La veo todavía . No debe estar tan lejos.

martes, 28 de febrero de 2012

lunes, 27 de febrero de 2012

Horizontes

Los días luminosos están presentes en forma de mañana.
Arrancados del vientre bueno de los deseos y de las ganas de seguir.
Brillan como bochitas espejadas sobre el horizonte del camino de hormiga y de la vuelta .

Sostenidas apenas por una tanza.
Pero esos días a veces no conectan con la rutina del tener que ser ,del tener que hacer...

El humor ,el desamor  ,la ansiedad y las horas se llenan de humo . Apenas ,nada . Existir.